En un momento difícil se lesionó Renato Tapia y Ricardo Gareca tuvo una difícil decisión de encontrar en el banco al reemplazo ideal para que no se derrumbe el equipo: Wilder Cartagena fue el elegido. Nunca antes había tenido minutos con el equipo absoluto.
Una vez que Wilder Cartagena entró en el campo demostró una actitud elogiable. Nunca transmitió temor en cada pase brindado y siempre luchó cada pelota como si fuera la última. Su primera aparición con la selección peruana fue digna de aplausos
«Me pasaron muchas cosas por la cabeza al ingresar al campo de juego. Estaba ansioso por entrar, gracias a Dios se me dio la oportunidad en Quito. Mis compañeros me felicitaron y eso me llena de confianza para seguir trabajando mucho más», sostuvo Wilder Cartagena en declaraciones con «Gol Perú».
El joven mediocampista de la Universidad San Martín, además, señaló que «todos quieren tirar para un mismo lado, en la cancha uno mata por el compañero y ese compañerismo se nota en la selección».