WASHINGTON.- Un ataque aéreo estadounidense causó el jueves más de 100 bajas entre terroristas del Frente Al Nusra, filial de Al Qaeda, al destruir un campo de entrenamiento en una remota zona del noroeste de Siria.
La ofensiva fue llevada a por el bombardero de aviones B-52 de la Fuerza Aérea y un número no revelado de drones, informó un vocero estadounidense que se mantuvo en anonimato al no estar autorizado para dar mayores detalles.
Los militantes abatidos en los ataques aéreos fueron descritos por el funcionario como miembros «centrales» de Al Qaeda, que se habían trasladado a Siria a principios del año pasado para establecerse en la zona. (ECHA – Agencias)