EL CAIRO.- Los rebeldes sirios de la localidad de Daraya, al este Damasco, anunciaron una suspensión del alto el fuego alcanzado con el Ejército gubernamental, debido a que éste último continúa con sus operaciones.
En un comunicado firmado por 39 facciones incluidas en el Ejército Libre Sirio (ELS), los rebeldes afirman que el «acuerdo de alto el fuego está muerto» y que, ante los ataques de las tropas gubernamentales sirias, tomarán «todas las medidas adecuadas y responderán con los medios legítimos para defender a la población».
En la nota precisan que actuarán tanto en Daraya, población sitiada por el Gobierno sirio desde noviembre de 2012, como en otros frentes de batalla.
Asimismo, consideran que la tregua no facilita la llegada de ayuda humanitaria a las zonas golpeadas por la guerra, como Daraya, donde la ONU y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) no pudieron acceder a mediados de mayo.
La oposición armada explica que mantendrá su postura hasta que las fuerzas gubernamentales suspendan sus ataques contra las zonas «liberadas» y -además- vuelvan a sus posiciones anteriores a los avances realizados a partir del pasado 14 de mayo.
Entre los grupos más destacados que firman el comunicado se encuentra el Yaish al Islam (Ejército del Islam), el Frente de los Revolucionarios de Siria, el Batallón de Al Rahmán y el Movimiento Nuridín al Zenki.
Asimismo, ofrecieron a la comunidad internacional 48 horas para «salvar lo que queda del acuerdo, obligando el régimen criminal de Bashar Al-Asad y sus aliados a suspender inmediatamente y de forma total el ataque salvaje contra Daraya y las zonas de Guta Oriental», bastión rebelde al este de Damasco.
Por su parte, la Coalición Nacional Siria (CNFROS) anunció en un comunicado su apoyo total a la postura adoptada por los rebeldes armados y a sus reivindicaciones.
Actualmente rige en Siria un alto el fuego entre los rebeldes y las fuerzas gubernamentales, el que comenzó el pasado 27 de febrero, pero en el pacto no están incluidos los grupos armados extremistas.
EFE/ Foto EFE