LONDRES.- La agencia de medición de riesgo Standard And Poor’s (S&P) ratificó hoy la nota crediticia AA/A-1+ con perspectiva «negativa» al Reino Unido a raíz de la «incertidumbre» generada por el brexit o salida del país de la Unión Europea (UE).
En un comunicado, S&P consideró que la futura marcha británica del bloque comunitario «presenta un riesgo considerable al historial británico de sólido rendimiento económico y a su amplio sector financiero en particular».
La agencia de calificación señaló además que el resultado del pasado plebiscito del 23 de junio «ha llevado a un marco político menos predecible y estable» para este país.
«Afirmamos nuestra marca de AA/A-1+ a largo y corto plazo sobre calificación de crédito soberano para el Reino Unido», indicó Standard And Poor’s.
Según detalla en esa nota, «la perspectiva continúa negativa, reflejando la continuada incertidumbre institucional y económica que rodea las negociaciones del brexit, y los acuerdos que puedan surgir tras la salida».
Al justificar sus argumentos, la agencia valoró que la reciente decisión de los británicos en el citado referendo europeo representa un «riesgo potencial para el ingreso nacional del Reino Unido, así como para sus cuentas fiscales y externas».
Abandonar la UE «debilitará significativamente la capacidad británica para influir en las políticas de la UE en sectores clave de la economía del Reino Unido, como los servicios financieros, que son vitales para el rendimiento económico del Reino Unido».
S&P agregó que el «brexit» podría también, con el tiempo, «debilitar el papel de la libra esterlina (moneda que se depreció frente al dólar en más del 17 % tras la consulta) como una divisa de reserva global».
Se observa también que «las divisiones, tanto dentro del Partido Conservador gobernante, como en la sociedad en su conjunto, sobre la cuestión europea, podrían no sanar rápidamente y podrían empañar la estabilidad gubernamental y complicar las políticas sobre economía y otros asuntos».
Standard & Poor’s indica que podría «revisar» su perspectiva a estable «si la inversión y el crecimiento económico continúan estando por encima» de sus expectativas «y al mismo tiempo, las negociaciones con la UE resultan amigables y no significativamente perjudiciales para la economía y el comercio británicos».
A comienzos de este mes, la primera ministra británica, la conservadora Theresa May, anunció que antes de que termine el próximo marzo su gobierno activará el Artículo 50 del Tratado de Lisboa, que da comienzo formalmente al proceso negociador con Bruselas de dos años.
EFE/Foto: theguardian.com