La pareja homosexual que logró que un tribunal ordenara la inscripción de su matrimonio en el Perú, país en el que no está legalizado este tipo de unión, anunció este viernes que, si en segunda instancia rechazan su pedido, continuarán hasta la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Durante una conferencia de prensa, la pareja conformada por la activista por los derechos LGTB y política Susel Paredes y su esposa Gracia Aljovín, detallaron que son conscientes que la decisión del tribunal peruano de ordenar al Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) de inscribir su matrimonio realizado en el extranjero, puede ser revocado.
«Hemos ganado la primera instancia. Pueden pasar varias cosas, el procurador puede apelar. Si es así, entonces el proceso va a la Corte Superior y de ahí al Tribunal Constitucional. Si nosotros no ganamos aquí, nos vamos a ir a la CIDH», expresó Paredes.
Por su parte, Aljovín agradeció al juez Jorge Luis Ramírez Niño de Guzmán «porque se ha informado y ha dado una resolución muy bien argumentada».
Al ser consultadas por las leyes sobre el matrimonio civil en el Perú, Aljovín aseguró que la Constitución peruana no habla de géneros, pero que sí lo hace el Código Civil.
«Las leyes que priman que son las de la Constitución no hacen distinción alguna, pero el Código Civil sí. El Reniec no tenía la posibilidad de pronunciarse de otra manera», agregó.
En esa línea, Aljovín también expresó que espera que su caso se convierta en una «posibilidad» para que el Reniec registre los matrimonios entre personas del mismo sexo.
«Ya con las diligencias se va a abrir la posibilidad para que cualquier persona en el país pueda inscribirlos (matrimonios del mismo sexo). Y con estos triunfos, sumados a otros triunfos, ir cambiando la mentalidad de la sociedad para que reconozca nuestros derechos», agregó.
Paredes y Aljovín contrajeron matrimonio civil el 4 de agosto de 2016 en Miami y con su partida de matrimonio, debidamente apostillada, se presentaron ante el Reniec para solicitar su inscripción.
La petición fue rechazada por Reniec mediante una resolución donde argumentaba que el artículo 234 del Código Civil prescribe que el matrimonio es la unión voluntariamente concertada por un varón y una mujer, y que «al ser la de las solicitantes la unión concertada de dos mujeres, no es eficaz».
Asimismo, señaló que al haberse celebrado el matrimonio en la ciudad estadounidense de Miami, este se encuentra determinado por las normas comprendidas en el Libro X del Código Civil, que «determina que estos matrimonios sean regulados por el Derecho Internacional Privado de los países involucrados».
Un proceso similar al de Paredes y Aljovín vivieron en el país el economista peruano Óscar Ugarteche y su esposo, el mexicano Fidel Aroche, cuando en 2012 pidieron al Reniec la inscripción de su matrimonio.
El organismo también negó ese pedido, por lo que el caso llegó a la vía judicial, que en una primera instancia ordenó el registro del matrimonio, pero Reniec apeló y en 2018 un tribunal superior anuló la primera medida judicial argumentando que la pareja presentó su recurso de amparo de manera «extemporánea».
Ugarteche interpuso un recurso de agravio constitucional contra lo resuelto por la Sala, a fin de que el Tribunal Constitucional revierta la decisión de la Sala, no obstante su decisión sigue pendiente de resolución.
EFE/ Video Latina