Una facción del Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep) alista una nueva huelga nacional e indefinida convocada para este lunes, a similitud de la secundada el año pasado, que paralizó durante seis meses la educación pública básica.
El paro está convocado nuevamente por el Comité Nacional de Reorientación y Reconstrucción (Conare) del Sutep, liderado por Pedro Castillo, una facción que intenta arrebatar el control del sindicato de docentes al Comité Ejecutivo Nacional (CEN), en manos del partido izquierdista Patria Roja.
El Conare, que ahora se hace llamar Federación Nacional de Sindicatos Unificados de Trabajadores en la Educación del Perú (Fenasutep), esgrime como reivindicaciones para esta nueva huelga nacional el supuesto incumplimiento de los acuerdos alcanzados el año pasado.
También reclaman al Ministerio de Educación que deje de convocar como interlocutor del Sutep a los allegados de Patria Roja, a quienes acusan de no representar los intereses del profesorado peruano.
Entre los reclamos para este nuevo paro vuelve a estar un aumento de los salarios y de las pensiones hasta los 4.000 soles (unos 1.200 dólares) y la defensa de la educación pública.
El ministro de Educación, Daniel Alfaro, aseguró en una entrevista publicada este domingo en el diario Correo que su institución está cumpliendo con los acuerdos alcanzados el año pasado, como un aumento progresivo de los sueldos hasta los 2.000 soles (unos 600 dólares), que culminará en diciembre de este año.
Alfaro destacó que el 99 % de las maestras de educación inicial pasó satisfactoriamente la evaluación de desempeño a la que se oponía el sindicato, mientras que el 1 % recibirá capacitaciones para que lo intente nuevamente.
«Se decía que las evaluaciones a docentes serían despidos masivos; pero es falso. Más allá de despidos masivos, son formaciones masivas», comentó.
El ministro lamentó que el plan de recuperación de las clases perdidas en la anterior huelga no fue eficiente y la calidad de la educación fue mucho más baja, por lo que unido a este nuevo paro auguró que afectará con toda seguridad a los resultados de la nueva prueba Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA).
La huelga del pasado año terminó con una crisis en bloque del Gobierno, pues todo el Consejo de Ministros fue censurado por el Congreso, donde el fujimorismo tiene mayoría, ante una cuestión de confianza presentada por el entonces primer ministro, Fernando Zavala.
EFE/Fotos Crónica Viva