Mujeres y niñas discapacitadas arrastran herida perpetua de la esterilización forzada
«Aún espero que mis padres se arrepientan», dice Cristina, con síndrome de Asperger y esterilizada a los 18 años para evitar que tuviera “hijos enfermos». Saburo Kita, a sus 76, pide que le devuelvan la parte de vida que le quitaron en su adolescencia «para cumplir la cuota». Y María Elena Carbajal, con 50, se...