WASHINGTON.- Los aeropuertos de Dulles, Ronald Reagan y Baltimore, los más cercanos a Washington, reanudaron hoy sus operaciones tras la fuerte tormenta de nieve del fin de semana en los EEUU, pero afectados aún por cientos de cancelaciones y retrasos de vuelos.
Entre los aeropuertos que más siguen sufriendo los efectos de la tormenta Jonás con la cancelación de vuelos y retrasos siguen estando hoy también los de Newark (Nueva Jersey), La Guardia (Nueva York) y el de Filadelfia, mientras que también están afectados, aunque en menor medida, los de Kennedy (Nueva York), el Logan de Boston y el O’Hare de Chicago.
Según el sitio especializado flightaware.com, hoy 2.724 vuelos programados figuran con retrasos, a pesar de que hace más de 24 horas que paró de nevar, debido a la acumulación de vuelos que no pudieron despegar en los últimos dos días.
La tormenta, que ha causado al menos 29 muertes, ha obligado además a la cancelación de 1,715 vuelos previstos para hoy, frente a las 4.007 cancelaciones que se produjeron el domingo.
Entre las 6 y las 10 de la mañana de hoy, 187 vuelos se retrasaron y 152 se cancelaron, debido a que los principales aeropuertos aún no han podido retomar el tráfico normal, por la nieve en las pistas de aterrizaje y despegue.
El aeropuerto Internacional Libertad de Newark, en Nueva Jersey, cerca de Nueva York, encabeza el ranquin de los vuelos afectados, con 254 cancelaciones y 23 retrasos.
El aeropuerto de la ciudad de Nueva York La Guardia (LGA) tiene 163 cancelaciones, y el Dulles, cercano a Washington, ha anunciado 128 cancelaciones.
También en Washington, el Reagan, de vuelos internos, tiene 120 cancelaciones y 12 vuelos con retrasos, en una jornada en que la capital estadounidense se encuentra medio paralizada aún, con el gobierno federal cerrado.
Asimismo, Atlanta (Georgia), Chicago (Illinois), Boston (Massachusetts), Detroit (Michigan) son otros de los aeropuertos más afectados.
Las autoridades estadounidenses han alertado a la población de ampliaos sectores de la costa este del país que limiten en la medida de lo posible sus movimientos, e incluso advirtieron que los automovilistas serán multados si se aventuran a circular por las carreteras cubiertas de nieve.