WASHINGTON.- La Administración del presidente Donald Trump asesta un nuevo revés a la política medioambiental de su predecesor Barack Obama, al anunciar la revisión de los requerimientos para elevar la eficiencia de los automóviles y reducir las emisiones de efecto invernadero.
De esta manera se inicia el proceso para rebajar los objetivos establecidos para combatir la contaminación y luchar contra el cambio climático, a través de la agencia para la protección del medio ambiente (EPA, en sus siglas en inglés).
Videos relacionados
El mandatario considera que los estándares de eficiencia establecidos para los modelos que salgan al mercado entre 2020 y 2025 representan un reto técnico para los fabricantes.
La normativa en vigor establece que los coches deben lograr una autonomía de 50 millas por galón (21 kilómetros por litro).
Scott Pruitt, administrador de la EPA, considera que la política seguida por el anterior gobierno era “equivocada” y demasiado agresiva. “Se hicieron asunciones que no se ajustan a la realidad”, afirma, para después decir que los requerimientos establecidos son “demasiado altos”.
A partir de ahí señala que se van a redactar nuevas guías para coches y camiones ligeros para los modelos que salgan a la venta en el pariodo 2022-2025.
En la nota publicada por la EPA no se detalla cuál es el objetivo de la revisión y está por ver también cómo afecta el eventual cambio de regulación a California, que cuenta con una exención que le permite aplicar unos requerimientos de eficiencia más severos que en el resto del país.
El fin de este tratamiento especial podría desembocar en una dura batalla legal entre Washington y Sacramento.
La reacción en California fue instantánea. Los líderes y la prensa del Estado llevaban meses anticipando este movimiento y advirtiendo que plantarán cara, como en otros asuntos en los que la Administración estatal, completamente dominada por el Partido Demócrata se ha enfrentado a Trump en los tribunales.
El gobernador, Jerry Brown, publicó un comunicado en el que decía: «Atentos a esta broma con retraso del Día de los Inocentes (1 de abril, en Estado Unidos). Este abuso de poder cínico y ostentoso va a envenenar nuestro aire y amenazar la salud de todos los norteamericanos». (ECHA- Agencias)