WASHINGTON.- En medio de crecientes tensiones nucleares, el presidente Donald Trump abrió este lunes la puerta a una futura reunión con el mandatario norcoreano Kim Jong Un, al afirmar que “sería un honor” concretar una entrevista.
«Si fuera apropiado que yo me reúna con él, definitivamente lo haría, sería un honor hacerlo», declaró el mandatario estadunidense a Bloomberg News.
Pese a que la Casa Blanca minimizó las perspectivas de tal reunión en el corto plazo, los comentarios conciliatorios de Trump marcaron un cambio respecto a su tono más implacable hacia Corea del Norte en días recientes así como una nueva oscilación mientras su gobierno batalla para articular su política en torno a este tema.
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Durante la campaña electoral Trump insinuó que estaba abierto a reunirse con Kim, pero no lo había repetido desde que asumió el cargo.
Las nuevas pruebas de misiles por parte de Corea del Norte y su avance hacia el desarrollo de un arma nuclear capaz de atacar la parte continental de Estados Unidos, han convertido a la aislada dictadura comunista en una de las principales preocupaciones de seguridad nacional para Estados Unidos.
Tras calificar la “paciencia estratégica” del presidente Barack Obama con Corea del Norte como un total fracaso, Trump y sus asistentes afirman que tienen una estrategia más agresiva, y han advertido sobre una potencial confrontación militar si la nación asiática no cambia de rumbo.
Estados Unidos ha planteado incluso la posibilidad de un ataque preventivo si Pyongyang realiza otra prueba nuclear.
No obstante, en otras ocasiones el gobierno de Trump ha tentado con ofrecimientos de restablecer negociaciones con Corea del Norte e incluso insinuado que reanudaría la ayuda alimentaria al país una vez que comience a desmantelar su programa nuclear y el de misiles.
Trump y su equipo han sido consistentemente claros: una solución requiere a China, el mayor socio económico de Corea del Norte.
Trump tiene la esperanza de que China pueda presionar a Corea del Norte hacia una desnuclearización pacífica, lo que el gobierno de Barack Obama buscó sin éxito el mismo objetivo durante años.(ECHA- Agencias)