WASHINGTON.- Minutos antes del anuncio de las sanciones contra Arabia Saudita por el asesinato del periodista Jamal Khashoggi, el presidente Donald Trump calificó las explicaciones que hasta ahora ha dado Riad como «una mala coartada».
«El plan original era muy malo, se ejecutó muy pobremente y la coartada es la peor coartada en la historia de las coartadas. Tenían la peor coartada en la historia», dijo el mandatario en una breve comparecencia ante los medios en el despacho Oval.
En un intento de aislar al príncipe heredero del escándalo, la corona saudí ha aducido que un reducido grupo de altos funcionarios ordenó un interrogatorio del disidente en el consulado en Estambul, informó este martes el diario español El País.
Este, según esa misma versión, se resistió y murió en una pelea a puñetazos. La inteligencia turca, sin embargo, tiene pruebas de que fue torturado y descuartizado, de acuerdo con un plan ideado en Riad por personas de la máxima confianza del hijo del rey, Mohamed bin Salman.
El Gobierno de EEUU anunció este martes sanciones contra Arabia Saudí por el asesinato del periodista Jamal Khashoggi, que vivía exiliado en Washington.
En una conferencia de prensa, el secretario de Estado [ministro de Exteriores], Mike Pompeo, ha anunciado que revocará los visados que hayan sido concedidos a los 18 hombres sospechosos de haber participado en la operación el 2 de octubre.
«Estas sanciones no serán las últimas que aplique EE.UU. Seguiremos de cerca la situación para que los responsables paguen por sus actos», dijo Pompeo, quien añadió que el departamento del Tesoro está estudiando la posibilidad de aplicar sanciones financieras a medida que avancen las investigaciones.
Horas antes, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dio detalles de lo que describió como un «brutal» plan saudí para matar al disidente en Estambul.
El peso de las pruebas recabadas por la inteligencia turca ha llevado a Washington a reaccionar, aunque tarde y de forma más bien tímida. Mientras Alemania ha suspendido cualquier venta de armas al reino árabe, EE.UU. de momento se conforma con retirar los visados de los que en teoría podrían disponer 18 personas.
El departamento de Estado no ha revelado cuántos de los sospechosos tenían permiso para entrar en EE.UU.