Los mercados no tardaron en reaccionar a una drástica caída de los precios del crudo por un 31%.
Así, los futuros de S&P 500 cayeron por hasta un 5% en la noche del 8 de marzo, lo cual activó un límite que previene la venta de futuros por debajo de este nivel. Por su parte, los futuros de Dow se desplomaron por más de 4,2%, y los de Nasdaq Composite por un 4,5%.
A su vez, el índice australiano S&P/ASX 200 cayó por un 5,9% el 9 de marzo, lo cual supone la mayor reduccion desde el octubre de 2008. La misma situación se observó en Japón, con el Nikkei hundiéndose por aproximadamente 5%, llevando al cierre más bajo en más de un año. El principal índice de Hong Kong, el Hang Seng Index, también sufrió un desplome de un 3,87%.
Dos de las principales razones de esta caída de los mercados por todo el mundo ha sido una drástica reducción de los precios del crudo de la marca Brent que tuvo lugar tras el fallo de los países OPEP y no OPEP en acordar el 6 de marzo la extensión del recorte de producción petrolera vigente desde 2017 con lo cual a partir del 1 de abril las restricciones se levantan para todos lo miembros del antiguo pacto, mientras la demanda se ve mermada entre otros factores por el brote mundial del coronavirus SARS-CoV-2. (Sputnik)