MONTEVIDEO.- Alrededor de 2,000 personas se congregaron hoy en Montevideo en una carrera solidaria organizada por la Asociación Down Uruguay con el objetivo de dar más visibilidad a la población con Síndrome de Down y a algunas situaciones de discriminación que viven, como en el ámbito laboral.
La presidenta de la organización, Nidia Viña, explicó a Efe que la primera edición de esta carrera -denominada Down 5K- se enmarca en la celebración del Día Mundial del Síndrome de Down, que tuvo lugar el pasado 21 de marzo, y que la idea es hacer que la sociedad se abra a las personas que tienen esta anomalía congénita.
«Es una carrera que no tiene carácter competitivo (…), queremos mostrar que nuestros hijos con Síndrome de Down tienen un gran potencial que tenemos que desarrollar y que la sociedad tiene que abrirse tanto a ellos como a otros que están en alguna situación de discapacidad», aseguró Viña.
La recaudación de la Down 5K, en la que cada participante pagó 250 pesos (unos 8 dólares), se destinará a mejorar la infraestructura de la Asociación Down Uruguay, la cual desarrolla distintas actividades con el objetivo de mejorar la inclusión de las personas con Síndrome de Down.
En ese sentido, Viña destacó que, a pesar de que se han dado algunos pasos en el país suramericano, todavía queda mucho por hacer, por ejemplo, en cuanto a la inclusión en la educación o en el mercado laboral.
«Tratamos de que nos avisen cuando hay un nacimiento con Síndrome de Down en alguna de las maternidades para ir a acompañar» a los padres en ese momento y explicarles que no es algo negativo, apuntó.
«Sigue pasando que en el momento del nacimiento el personal de salud no sabe cómo reaccionar. La mayoría de las veces la reacción es casi negativa, no acompañan, no dan una visión positiva del asunto», aseguró Viña, que señaló que en 1999 se hizo un censo de la población con esta anomalía congénita y que no se ha actualizado desde entonces.
En el acto solidario también estuvo la ministra de Turismo de Uruguay, Liliam Kechichián, quien acudió para acompañar a su nieto Felipe, que tiene Síndrome de Down.
«Es un mensaje claro de inclusión, que me parece que la sociedad sigue necesitando, si bien hemos avanzado, todavía hay muchos episodios de discriminación. En mi caso soy abuela de un nieto con Síndrome de Down y desde que he tenido cerca el tema he aprendido a valorarlo de otra manera, a comprenderlo, a saber que cada uno tiene su ritmo, pero que todos podemos dar muchísimo», dijo la ministra.
La titular de la cartera de Turismo también señaló a Efe que «si bien Uruguay tiene una ley de la discapacidad que se está cumpliendo, hay muchísimo para seguir haciendo, fundamentalmente en una educación inclusiva».
«En lo personal, no comparto las educaciones especiales, me parece que lo mejor es integrar a los niños», agregó.