MONTEVIDEO (Uruguay).- La renovación de protagonistas, la unidad oficialista, la reñida competencia de los candidatos opositores, la vuelta de un expresidente y la aparición de un millonario en escena son algunas de las claves que se enmarcan en el mes de las elecciones internas de Uruguay que comienza este sábado.
El 30 de junio la población uruguaya deberá elegir en las urnas a los candidatos de cada partido político para las presidenciales de octubre.
La coalición de izquierdas Frente Amplio (FA), que gobierna el país desde hace 15 años, presenta cuatro precandidatos y los partidos de la oposición, el Nacional y el Colorado, tendrán cinco cada uno.
El FA ha tomado una estrategia diferente a la oposición buscando mostrar unidad y que sus candidatos intenten fortalecer al partido en lugar de confrontar entre ellos.
En cambio, los candidatos de otros partidos han optado por exponer sus ideas en una clara disputa entre ellos.
«Esta campaña ha sido hasta el momento bastante tibia, menos de lo que se pensaba. Me parece que todos se han estado cuidando», dijo a Efe el politólogo Alfonso Lessa, quien consideró también que, de confirmarse las tendencias que marcan las encuestas, habrá una renovación en sus principales figuras.
En este sentido, el experto destacó que el oficialismo, a diferencia de otras contiendas electorales, antepone «la unidad interna».
Sin embargo, según las encuestas, el exintendente de Montevideo Daniel Martínez es quien se distancia de sus competidores.
En concreto, la investigadora Opción Consultores indica que Martínez tiene 46% de la intención de voto seguido de la exministra de Industria Carolina Cosse con 27%, el sindicalista Oscar Andrade con 12% y el expresidente del Banco Central Mario Bergara con 10%.
Por lo tanto, todo parece indicar que el sector que encabeza el expresidente José Mujica, el Movimiento de Participación Popular (MPP), que apoya a Cosse, va a tener un nuevo revés en la elección ciudadana.
«Significaría la cuarta derrota consecutiva interna del sector de Mujica, lo que sería un mensaje muy fuerte. Sería una señal importante que después hay que ver cómo se traduce en octubre cuando se elija el Parlamento, pero cuatro derrotas consecutivas estarían diciendo algo de cambios en la izquierda», detalló Lessa.
Lacalle o Sartori, ¿quién ganará la interna blanca?
Respecto al Partido Nacional (PN, o blanco), el experto consideró que tendría «que cambiar todo» para que Luis Lacalle Pou pierda las internas, debido a que «ha hecho una muy buena campaña» y se le nota «más maduro» que en elecciones anteriores.
Opción Consultores indica que Lacalle Pou tiene 42%, el magnate Juan Sartori 27%, el senador Jorge Larrañaga 25%, el intendente Enrique Antía 3% y Carlos Iafigliola no suma porcentaje.
«La gran sorpresa es Sartori. Si efectivamente logra una votación como la que indican las encuestas, esto quiere decir que había una demanda oculta de una alternativa distinta a la que se estaba planteando», explicó.
El millonario, dueño de un equipo de fútbol inglés, de un medio de comunicación uruguayo y de varias empresas, apareció de manera sorpresiva a finales de 2018 en Uruguay para anunciar su candidatura a la Presidencia.
Tras varios meses de publicidad, entrevistas e incluso de presentar un libro autobiográfico, Sartori se ha posicionado en la contienda política y ya desplazó en las encuestas a Larrañaga, un histórico candidato del PN.
El regreso del histórico Sanguinetti
El Partido Colorado (PC) tiene dos candidatos que están realmente en carrera: el expresidente Julio María Sanguinetti y el economista Ernesto Talvi.
Aunque parecía que el exmandatario de 83 años iba a arrasar en la intención de votos, Talvi de a poco ha ido ganándose su lugar y algunos hasta hablan de «empate técnico» entre ellos.
«Talvi, que dejó esa postura de economista, técnico y se ha ido transformando en un político, con un discurso que lo ubica como un referente político importante», acotó el politólogo.
Según Lessa, «el peor escenario» para Talvi sería perder la interna pero quedar como el principal líder del PC con vistas al futuro.
«Falta un mes de campaña y pesa. Si uno empieza a estudiar del Uruguay por lo menos desde el regreso de la democracia, va a ver que las campañas muchas veces cambiaron el viento de cómo venía la cosa», matizó.
Respecto a las internas, la presidenta del PN, Beatriz Argimón, dijo a Efe que se está viviendo una interna «muy competitiva» pero ordenada.
«Entre los precandidatos hay un diálogo correcto, todos pensando en el 30 de junio. Es verdad que especialmente al principio hubo momentos donde las reacciones frente a la aparición de un candidato no conocido que despertó distintas reacciones pero al día de hoy, que es cuando empieza realmente la ciudadanía a acercarse a la interna del partido, cada uno está haciendo y desarrollando su estrategia», acotó.
Asimismo, aseguró que ve «con mucha satisfacción» el nivel de militancia y la unidad del partido, fundamentalmente de los votantes más jóvenes.
¿Un cuarto Gobierno del Frente Amplio?
En tanto, el presidente del FA, Javier Miranda, señaló a Efe que se está viviendo «una campaña fuerte» desde el oficialismo aunque destacó el hecho de que su fuerza política presente «un programa único» y que sus precandidatos hagan actos en conjunto.
«Estas cuatro candidaturas expresan la diversidad dentro del Frente. Siendo coalición de partidos y movimientos tienen diversidad y estas candidaturas las expresan», apuntó.
Además, Miranda aseguró que el principal objetivo del FA es llegar al cuarto periodo de gobierno consecutivo.
Si bien no se atrevió a dar números, el presidente del FA auguró una buena cantidad de votantes en las internas y afirmó que, pese a que su partido muestra una caída en la intención de voto y ya no tiene claro favoritismo para quedarse con el Gobierno, el oficialismo «está mas fuerte que los demás partidos».
«Creo que Sanguinetti es la síntesis de lo que está pasando en la carrera política del país, que convoca a conformar una coalición contra el FA no para ser presidente sino para que el sector más conservador derrote al proyecto de la izquierda», concluyó.
Con una tendencia a la renovación, con figuras políticas que reaparecen en la contienda, con un millonario que surgió de la nada y movió el tablero y con un oficialismo que intenta mostrarse unido para recuperar los votos que parece haber perdido, el mes de junio será solo el comienzo de una larga contienda electoral que, todo indica, finalizará en noviembre en segunda vuelta.
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