Miles de personas acuden a las playas en este verano por el intenso calor, pero muchas de estas zonas de esparcimiento están sucias y el público queda expuesto a materiales peligrosos sobre todo para aquellas que padecen de diabetes, alertó la endocrinóloga Romyna La Rosa Vásquez.
“El paciente debe cuidar más sus pies, porque si la diabetes está mal controlada puede generar neuropatía diabética, con la que pierde la sensibilidad. En verano se suelen mantener los pies al descubierto y, con menos sensibilidad, puede que el paciente no sienta alguna lesión que, si no se trata, puede complicarse”, enfatizó Romyna La Rosa Vásquez.
Según la especialista Romyna La Rosa Vásquez, el paciente con diabetes debe asegurar que sus pies estén secos y protegidos. Recomendó nunca caminar con los pies descalzos y siempre revisar al final del día si se tiene alguna herida.
De acuerdo a la doctora Romyna La Rosa Vásquez, si el paciente es insulino requirente, el calor y la natación pueden hacer que la insulina sea absorbida más rápido en el cuerpo. En caso ocurra, las dosis de comidas y líquidos que el diabético ingiere deberá ser ajustada y, asimismo, la glucosa medida con mayor frecuencia, para así llevar un control más preciso.
Carlos Sáenz
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