LOS ÁNGELES/EEUU.- Warner Bros. causó un gran terremoto en Hollywood al anunciar que en 2021 todas sus películas se estrenarán a la vez en salas y en la plataforma HBO Max, pero a partir del año que viene el estudio dará exclusividad de nuevo a las salas en una cierta vuelta a la normalidad tras la pandemia.
El portal Deadline adelantó hoy que Warner Bros. y la cadena de cines Regal han llegado a un acuerdo para que los lanzamientos del estudio desde 2022 tengan 45 días de exclusividad en las salas antes de desembarcar en el mercado digital.
Este pacto supone un nuevo cambio en lo que se conoce en Hollywood como ventanas de distribución, que es el plazo que va de la exhibición en los cines a la llegada de las cintas a los hogares.
Hasta la crisis del coronavirus, el plazo habitual era de 90 días.
Sin embargo, la pandemia obligó a rediseñar este sistema antes intocable con iniciativas como la del estudio Universal y la cadena de salas AMC, que el pasado julio anunciaron un acuerdo histórico por el cual las películas de Universal Pictures y Focus Features se verán en los cines de AMC durante 17 días (incluyendo tres fines de semana) y después podrán pasar a internet.
El acuerdo ahora entre Warner Bros. y Regal refuerza esa tendencia de transformación en el sector de la exhibición y de reequilibrio de fuerzas entre los cines y el mercado digital.
Además de su alianza con Warner Bros., Regal, que es la segunda cadena de cines más grande en EE.UU. después de AMC, anunció hoy que reabrirá sus salas el 2 de abril tras seis meses de puertas cerradas por culpa de la pandemia.
Esta reapertura coincidirá prácticamente con el estreno de Godzilla Vs Kong, superproducción de Warner Bros. que verá la luz el 31 de marzo en salas y HBO Max al mismo tiempo.
WARNER BROS. Y LA PANDEMIA
Warner Bros. fue en 2020 el estudio más valiente (o temerario) de Hollywood a la hora de responder a la pandemia.
Mientras sus rivales retrasaban todos sus estrenos y dejaban en la estacada a las salas, esta compañía se arriesgó a presentar el pasado verano una enorme producción como «Tenet» en la gran pantalla después de meses con los cines cerrados por el coronavirus.
Esta estrategia comercial no funcionó nada bien en EE.UU., donde la película de Christopher Nolan ha recaudado solo 57,9 millones de dólares y donde no se pudo ver en mercados tan importante como el de Los Ángeles (EE.UU.) hasta la semana pasada.
La lección de «Tenet» fue tomada por el resto de estudios como un aviso para navegantes (en el resto del mundo se anotó 305,2 millones).
Pero el golpe más contundente de Warner Bros. llegó con su anuncio en diciembre de que todas sus películas de 2021 se estrenarían de forma simultánea en cines y HBO Max.
En la plataforma digital solo se pueden ver estas cintas durante un mes.
Bajo estas condiciones ya se han estrenado apuestas tan ambiciosas de Warner Bros. como «Wonder Woman 1984».
El mismo camino seguirán el «remake» de «Dune» a cargo de Denis Villeneuve, la cuarta cinta de «Matrix», el musical de Lin-Manuel Miranda «In the Heights», la nueva «The Suicide Squad», la recuperación de «Mortal Kombat», la secuela de «Space Jam», o la cinta «Cry Macho» de Clint Eastwood.
Aunque la decisión de Warner Bros. permitió a las salas contar en 2021 con películas nuevas que estrenar tras unos meses ruinosos de reposiciones de clásicos y de lanzamientos de cintas independientes, voces muy respetadas del cine criticaron esta medida.
Especialmente notables fueron los ataques de Christopher Nolan («Tenet») y Denis Villeneuve (la nueva «Dune»), que se entendieron como goles en propia puerta de Warner Bros.
«Lo que hay ahora en nuestro negocio es un gran uso de la pandemia como excusa para sacar ventajas a corto plazo. Y es realmente lamentable», dijo Nolan.
«Con esta decisión, AT&T (el conglomerado al que pertenece Warner Bros. a través de WarnerMedia) ha secuestrado uno de los estudios más respetables e importantes de la historia del cine», apuntó Villeneuve. EFE